Tus sueños y tu imaginación no son lo mismo. Tus
sueños son deseos que a veces son inalcanzables pero que te gustaría verlos cumplir;
la imaginación es la habilidad de visualizar con claridad lo que quieres de tu
vida, verla, luchar y conseguir lo que deseas. La imaginación es un don, tanto
para saber donde quieres ir como para crear algo, unas palabras, una línea en
un lienzo o tal vez un verso. Es un don que estamos perdiendo por la vida
diaria, existimos, sobrevivimos y pasan los días y los meses y los años,
dejándonos llevar y sin crear algo nuevo, diferente, eso que nos hace distintos
a todos los demás, nos hace mágicos. Ese don debemos recuperarlo, parando el
reloj, reflexionando, echando nuestra imaginación a volar fuera de nuestro
entorno, salir como un pájaro de su jaula en la que estamos metidos. La
imaginación nos libera de tantas imágenes prefabricadas que nos invaden por
todas partes. La imaginación es como un ensayo para una nueva vida, un nuevo
mundo, un nuevo camino y una mejor manera de ser.
La imaginación debe ser alimentada con luz y no con elementos dañinos que nos hagan peores personas. La imaginación nos hace visualiza el verdadero destino de nuestras vidas, lo que queremos de ellas y así, cerrando los ojos, viendo eso que deseamos, se cumplirá.
La imaginación debe ser alimentada con luz y no con elementos dañinos que nos hagan peores personas. La imaginación nos hace visualiza el verdadero destino de nuestras vidas, lo que queremos de ellas y así, cerrando los ojos, viendo eso que deseamos, se cumplirá.
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